El futuro de empresas de desarrollo móvil pasa por las apps sociales
La verdad es que el escenario para la empresa de aplicaciones móviles ha cambiado poco desde sus inicios (lanzamiento del primer iPhone). Por aquel entonces los contenidos de la web ya eran sociales. Facebook ya era una red consolidada mundialmente, y en España Tuenti también se había impuesto como herramienta de uso diario. Sin embargo, hasta las mejores empresas de desarrollo de aplicaciones móviles comenzaron con mal pie, desarrollando contenidos más parecidos a los de la etapa pre-social.
Los comienzos de las apps estuvieron marcados por el vacío de contenidos que existía; prácticamente todo estaba aún por desarrollar. Se trataba más bien de adaptar funcionalidades ya existentes en el mundo de los ordenadores para implementarlas en los nuevos sistemas operativos móviles. Esa etapa tardó bastante poco en quedar superada. No había innovación alguna, se trataba de copiar productos: mensajería instantánea, gestores de correo, editores de imagen… y todo lo que ya existiera para PC o Mac.
El problema llega cuando la empresa de diseño y desarrollo de apps móviles tiene que enfrentarse al desafío que supone la innovación.
La mayoría de ellas se adaptaron mal. Muchas se quedaron en la etapa anterior y eso les costó su propia supervivencia. Pero la realidad implicaba una nueva forma de entender el mundo de las apps. El cambio de paradigma implica entender los dispositivos móviles como lo que son: móviles. Esta premisa nos permite idear aplicaciones que exploten el potencial del que disponemos: geoposicionamiento, uso continuo y permanente de los usuarios, componentes sociales, etc. En el siguiente artículo analizaremos todas esas nuevas funcionalidades que marcan el camino a seguir y el enorme potencial de crecimiento que ofrecen para el sector del desarrollo de las apps.
